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Resonancia preverbal

“Mi carne sabe, tu espíritu saborea el borde. 

Seamos nómades por un rato, develemos algo posible desde siempre.”

En este trabajo se plantea un universo en el que sobresale aquello que podemos hacer juntos, todo lo que está entre dos y no las características de las individualidades. Se investiga a partir de la potencia que despliega lo plural pero sin configurarse jerárquicamente. La creación es posible en vínculo con el otro, con la materia, las ideas, el espacio. El poder se desarrolla en vínculo con el otro, pero se limita al ejercerse por encima. 

Resonancia preverbal genera entre dos cuerpos, un territorio común en constante transformación, una geografía móvil que vuelve los bordes imperceptibles. Un juego de roles mutantes y continuos que no se instauran, no se formalizan. Un espacio-tiempo que se devela y siempre estuvo allí, se compone y descompone rítmicamente, torciendo los límites, desdibujando la frontera entre principio y fin. Frontera como espacio de posibilidades, un medio moviente entre la percepción y la acción. Una alucinación posible de estar sin ser.

Creación y performance: Catalina Lans y Gianni Penna

Música y performance: Aina Zanoguera, Guilherme Rodriguez

Mirada externa: Cecilia Ivanier

Diseño de iluminación: Natalia Granja

Aportes sonoros: Lucía Romero

Asistencia técnica: Hugo Vacas

Colaboración versión calle: Julieta Aurora Santos

Creación en residencia en Centro de Artes y Ciencias GEN y Taller de danza y creación Casarrodante (Montevideo, Uruguay)

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